Pese a los recortes presupuestarios, las autonomías gastaron el año pasado 169.819 millones de euros, casi 7.600 millones más que en 2011. Y eso que en 2012 evitaron pagar la extra de Navidad a sus empleados, un ahorro coyuntural con el que no contarán este año. Varias comunidades lograron reducir los gastos en 2012, pero no la mayoría. Parte de esto se debe a que, en mayor o menor medida, todas las autonomías han tenido que hacer frente a multimillonarios pagos de facturas atrasadas de años anteriores.