Hace más de un siglo que los vecinos y turistas que pasean por una de las placitas con más encanto de Sitges admiran la preciosa portada gótica de Palau de Maricel, en el edificio que el millonario norteamericano Charles Deering compró en 1910 para reunir una gran colección de piezas artísticas de toda España. La conocida durante décadas como “puerta de Salamanca”, labrada en piedra arenisca, ya tiene denominación de origen: la desaparecida iglesia de San Adrián, una de las más notables construcciones de arte románico y gótico
|
etiquetas: salamanca , sitges , portada gótica , expolio , desinterés