El 13 de marzo de 2024 despegaba desde Xichang un antiguo cohete CZ-2C en la misión Y67 con una carga inesperada: una pareja de pequeños satélites destinados a orbitar la Luna. Sin embargo, la misión fue víctima de uno de los poco frecuentes fallos del programa espacial chino. Pero, contra todo pronóstico, cinco meses y medio y sobrevuelo lunar más tarde, los dos satélites llegaron a la órbita lunar. La empresa fabricante de los satélites, Microsat (IAMCAS), no se rindió. Los satélites, unidos entre sí, realizaron dos encendidos de corrección de órbita en el perigeo los días 18 y 23 de marzo para elevar su apogeo significativamente. China no ha publicado las cifras precisas, pero el 26 de marzo la Fuerza Espacial de EE. UU. detectó los satélites en una órbita de 971 x 225 193 kilómetros.