Cosas increíbles sobre drogas

Hace pocos días salió la noticia de la condena a un año de prisión a unos individuos por colocar 47 gramos de cocaína en el coche de un ecologista. Si los acusados hubieran vendido la cocaína al ecologista hubieran sido condenados a entre 3 y 6 años de cárcel.

Es decir colocarle a alguien droga contra su voluntad y sin su consentimiento está mucho menos penado que dársela cuando la pide voluntariamente. ¿Es esto lógico y sensato?

Pero este no es un hecho puntual, hay cosas aún mas irracionales. En los casos de violación por sumisión química, la pena por la violación será la que sea pero pero la pena por meterle la droga en la bebida suele ser una no muy cuantiosa multa por un delito de lesiones leves. En esto se le ve el plumero al estado represor porque en buena lógica el vender una droga a alguien debería considerarse también un delito de lesiones (suponiendo que la droga en cuestión le hiciera algún mal al que la toma, cosa que puede pasar alguna vez pero que no sucede en la mayoría de las veces). Es decir se pena mucho mas por un perjuicio hipotético que por un daño cierto ya que las victimas cuentan que pasaron un muy mal rato y mucha angustia.

A parte de estas relaciones de las drogas con los delitos, los distintos poderes políticos, policiales y mediáticos se empeñan en relacionar drogas y delitos, esto se consigue muy fácilmente legislando el consumo como un atenuante, si haces un delito y dices que ibas drogado o que lo cometías para poder comprar droga, la pena puede ser menor. Como la mayoría de la gente no es tonta todos los que son detenidos y van a juicio juran y perjuran que fue la droga la que les condicionó a delinquir, y es entonces cuando los que manejan el cotarro pueden asegurar con datos que droga y delito van juntos de la mano.

El como una artimaña tan simplista y evidente puede pasar por cierta solo se puede explicar con la complicidad de los medios de comunicación que están permanentemente en cruzada contra la droga, dando lugar a una cosa también increíble como es que de unas substancias que se vienen usando por la humanidad desde tiempos inmemoriales y que solo hace unos 100 años que están prohibidas, no se pueda decir nada positivo sino solo se dicen cosas negativas, las drogas no son algo que pueda ser inconveniente o peligroso en algunos casos, es que son malas por naturaleza como el robo la violación o el asesinato. Son el mal del que nos quiere proteger el estado.

El asunto de las drogas no es un asunto menor, como pretenden algunos, sino que es el límite de la libertad hoy en día, cuando el estado ha abierto la mano en lo referente a la homosexualidad, que está ya totalmente aceptada e integrada pero se pone en lo referente a las drogas como la línea roja que no se puede traspasar porque el estado siempre ha necesitado un peligro imaginario del cual proteger a súbditos o ciudadanos por mas que pueda incurrir para ello en las mas grandes contradicciones.