Ahora que cumple cuarenta años EL INCAL, me he acordado de una anécdota que viví en directo con Jodorowsky. Os la cuento: El Jodo vino hace un porrón de años a dar una charla/consultorio psicomágico de esas que da en plan gurú a Santiago de Compostela, al CGAC, el Museo de Arte Moderno. Le conducía la charla, que más bien resultó ser monólogo, a duras penas Sanchez Dragó. Tal mezcla de trospidez, rollo iluminado y literatura de tebeos era como poner un cordero al alcance de un lobo para mi, así que no supe resistirme y acudí.