Qué historia tan buena, la de Enrique Crespo, miembro del PP, alcalde de Manises y vicepresidente de la Diputación de Valencia. El jueves, en el sorteo de Navidad resultaron premiados unos décimos que llevaba y que precisamente había vendido el PP de Manises. Eufórico, no se fue a la administración con una botella de champán para rociar a la gente, pero poco faltó. En plena celebración, a la pregunta de cuántos décimos premiados tenía respondió que "bastantes", más que los que tenía el presidente de la Diputación, que según parece tenía cinco.