El 2 de abril de 1983, este domingo cuarenta años atrás, se cumplía apenas un año del desembarco de las tropas argentinas en las Islas Malvinas[...]Fue pues aquel primer aniversario, el día escogido por Pink Floyd –todo Roger Waters, medio David Gilmour y un cuarto de Nick Mason, por entonces— para editar el bello y melancólico disco[...]Un nombre que derivaba de múltiples sentidos. Dos de ellos, centrales: el del final –parcial, a vistas futuro-- de la banda, pero también el de una guerra infame que puede rastrearse a trasluz de sus canciones.