Parece que sí, que poderse, se puede. Y no sólo Esparza y su UPN, sino hasta el PP. Sí, el PP que puso la melodía para animar a la concurrencia a darle cántico en su concentración. Sí, sí, el de Txapote, el que las víctimas dijeron que dejaran de cantar. El sábado cargos relevantes de UPN como Miguel Sanz, presidente entre 1996 y 2011, o su diputado Alberto Catalán estuvieron en la última concentración contra la investidura de Sánchez en Tudela. El domingo, Esparza plantea abrirse a pactar con PSN y hasta con Geroa Bai.