Los investigadores, pertenecientes al Instituto de Tecnología Technion-Israel, manipularon las neuronas de roedores sanos, que no padecían ninguna dolencia física, y vieron aparecer de pronto una inflamación provocada por la manipulación cerebral. Esto ilustra el poder del cerebro para iniciar una enfermedad física y muestra cómo sucede, dicen los investigadores, según
informa el periódico The Times of Israel.