El cabello tiene un ciclo de nacimiento, crecimiento, reposo y caída que va repitiéndose durante muchos años. Por lo tanto, perder cabello es algo totalmente normal ya que volverá a crecer uno nuevo en su lugar. Existen épocas del año, como el otoño, en las que parece que la pérdida se incrementa. Y no hay que preocuparse por ello, salvo si apreciamos que el ritmo de recuperación no es el que debería.