Aunque militen en distintas fuerzas políticas, los cuatro representan lo mismo. O, por lo menos, tienen un objetivo común: desestabilizar España, acabar con lo que ellos llaman el régimen del 78 y alcanzar el poder, a cualquier precio. Pablo Iglesias, Ada Colau, Ana Gabriel y Gabriel Rufián, andan estos días intentando levantar al pueblo contra el Estado de derecho y la Justicia española, utilizando todas las excusas posibles para que triunfe el relato que les pueda llevar a un gobierno de coalición de la izquierda radical en Cataluña.