(...) En concreto, las nuevas normas pretenden que el etiquetado de los productos sea más claro y fiable mediante la prohibición del uso de alegaciones medioambientales genéricas como “respetuoso con el medio ambiente”, “natural”, “biodegradable”, “climáticamente neutro” o “eco” sin aportar prueba alguna. También se regulará a partir de ahora el uso de etiquetas de sostenibilidad, dada la confusión provocada por su proliferación y por no utilizar referencias comparables. En el futuro, la UE solo permitirá etiquetas de sostenibilidad basadas...