El final de este siglo nos deparará grandes cambios en la distribución de la población mundial. China dejará de ser el país más poblado (lo será India), el Congo y otras naciones africanas dispararán sus habitantes de forma exponencial y España, por ej., perderá la mitad de sus residentes, hasta quedarse en 23 millones, frente a los 46 actuales. Desde el punto de vista medioambiental, esta reducción causará una disminución generalizada de los impactos que sufre el planeta, según los expertos, pero al mismo tiempo planteará otros desafíos...