Las mujeres siguen sufriendo discriminación en la ley y en la práctica en Qatar. En virtud del sistema de tutela, las mujeres necesitan el permiso de su tutor varón —por lo general, su esposo, padre, hermano, abuelo o tío— para contraer matrimonio, estudiar en el extranjero con becas del gobierno, ejercer muchos empleos públicos, viajar a otros países (si tienen menos de 25 años), y acceder a atención de la salud reproductiva.