La propia consejera de Turismo del Cabildo de Fuerteventura, Olivia Estévez, no ha escondido su malestar por lo que ella califica de "reclamo de turismo sexual sadomasoquista proveniente de Alemania". Según el concejal nacionalista, la firma alemana se ha limitado a adelantarse a la firma del acuerdo, por lo que ya ha colgado en Internet publicidad y fotografías, lo que "no significa que esté operativo (...), nadie va a ir con látigos por la calle".