La Santa Sede cerró 2007 con unas pérdidas de 9,06 millones de euros, pero el Estado de la Ciudad del Vaticano lo hizo con un resultado positivo por valor de 6,7 millones de euros. Los ingresos de la Santa Sede en ese periodo fueron de 236,7 millones de euros y los gastos, de 245,8 millones de euros. Las donaciones recibidas por el Papa de parte de los fieles de todo el mundo, que alcanzó los 50,69 millones de euros frente a los 64,73 millones de euros del pasado año.