En la puerta de casa, en la calle, en las redes sociales, en WhatsApp… en estos días va a ser difícil que no nos topemos, real o virtualmente, con una cría de vencejo que ha caído de su nido antes de tiempo. Estos vencejos caídos en el suelo están condenados a morir, por lo que es urgente intentar ayudarlos. La primera opción a contemplar siempre debe ser trasladarlos a un Centro de Recuperación para que sean cuidados por profesionales. Pero pueden existir situaciones en las que esta opción resulte imposible o que incluso estén saturados.