Los participantes con el gen APOE e4, el factor de riesgo genético conocido más fuerte para la enfermedad de Alzheimer, tenían de cinco a nueve veces más probabilidades que los no portadores de morir de demencia, pero los hallazgos sobre el aceite de oliva se mantuvieron después de que los autores tomaron este factor en cuenta.
Duane Mellor, un dietista registrado que no participó en el estudio, señaló en julio que la investigación no proporciona una relación causal, sino más bien una asociación.