Un año antes de licenciarse en derecho, Andreíta Fabra ya tenía un puesto dentro de la ejecutiva provincial del PP. Su mérito: Ser hija de su padre. En 2008, se convirtió ya en Senadora por designación directa autonómica: A dedo, no electa por los ciudadanos. De ahí, a diputada. Desde entonces Andrea Fabra cobra dietas por ser diputada provincial, pese a que reside en Madrid, en un chalet que costó un millón de euros.Millón de euros que le prestó Bancaja, entidad que se aruinó percisamente por conceder créditos hipotecarios...