En esta ciudad, situada en la región de Baja Sajonia (que tiene el 20% del capital, además) entre Berlín y Hannover, Volkswagen es omnipresente: financia la universidad, gestiona el mayor museo y es propietaria del equipo de fútbol local, el VfL Wolsburgo, cuyo estadio no se llama por casualidad Volkswagen Arena. Una imagen ilustra esta dependencia. "Si visualizaras el tráfico de entrada y salida de la ciudad, parecería el pulso, siendo el corazón la planta de Volkswagen", señala el taxista Karsten Raabe, a la agencia Bloomberg.