El germen del IN [impuesto negativo] ha ido degenerando en adaptaciones y modificaciones con múltiples nombres: “renta básica universal”, “subsidio universal garantizado”, «ingreso básico universal«, «ingreso ciudadano«, «ingreso mínimo«, “ingreso mínimo vital”. Todas ellas condicionadas por principios éticos y sociales. Pero mucho más importante y por lo que da tanto que hablar: Por principios económicos. Algunos de estos términos simplemente son sinónimos, pero otros se diferencian en cuestiones esenciales.