A algunos de nosotros nos quitan el sueño los riesgos existenciales que nos acechan, como las pandemias devastadoras provocadas por fugas involuntarias de laboratorios en experimentos de ganancia de función, el inicio de una guerra nuclear global si las armas atómicas llegan a manos de grupos terroristas, un cambio climático irreversible, catástrofes provocadas por la inteligencia artificial, impactos de asteroides o, en última instancia, el inevitable aumento de brillo del Sol. Dadas las deprimentes noticias geopolíticas de estos días, es...