En las fotografías tomadas desde el espacio, podemos ver que nuestro planeta tiene más agua que tierra. Es un alivio, teniendo en cuenta que el agua es imprescindible para sostener la vida, pero al mismo tiempo resulta terrorífico pensar que, de toda el agua del planeta, el 97,5% es agua salada, solo el 2,5% es agua dulce. Esa minúscula porción de agua sin sal es la que mantiene la vida terrestre, todas las plantas y animales, que por supuesto nos incluyen a nosotros.