Si se diera el caso de que hubiéramos entrado en una nueva guerra fría, convendría no repetir los errores cometidos durante la época de confrontación bipolar entre los Estados Unidos y la Unión Soviética. Cada vez son más los políticos y, sobre todo, los observadores, los académicos y los medios de comunicación, que creen que ya estamos muy cerca de una nueva etapa bipolar, competitiva y llena de peligros bélicos, esta vez entre los Estados Unidos y China.