Mezclando el cine mudo, la comedia de enredos y el policial negro, Carlos Trillo cuenta la vida de los Fratelli Centobuchi, una disfuncional familia italiana formada por un mafioso (Amerigo), un sacerdote (Francesco), una asesina (Carmela), un policía (Antonio) y una actriz (Caterina). Además de adelantarse varios años a Los Soprano (obra a la que seguramente inspiró), Trillo se burla de las tradicionales películas y series prime-time donde cualquier conflicto, por duro que sea, puede resolverse dentro de la familia