La expedición científica Alter-C desvela que el antiguo mar de Aral es hoy un ecosistema moribundo que emite a la atmósfera tanto CO2 como Dinamarca. «Si no fuese porque es la herencia de un desastre, podríamos decir que este sitio es increíble», afirma Rafael Marcé, ecólogo del Centro de Estudios Avanzados de Blanes, en Girona. Marcé viajó al Aralkum en el verano de 2022 en el marco de la expedición dirigida por el Instituto Catalán de Investigación del Agua (ICRA-CERCA), para averiguar qué sucede cuando secamos un mar.