Quien me conoce un poco sabe que soy comunista. Así que, ante una dictadura fascista o nazi, seguramente sólo pudiera intentar escoger el vagón de tren que me lleva al campo de concentración. No obstante, intento analizar los datos con la mayor objetividad posible. La expresión que da título al artículo, esa “conspiración judeo-masónica”, suele ser objeto de sorna desde la izquierda, sin duda …