Al oeste de Irlanda, en medio de una ciudad antigua y muy tranquila, se encuentra el río Corrib que, por su corta extensión, es famoso en el Viejo Continente y en todo el mundo. Sucede que este caudal de agua es uno de los ríos más cortos de Europa. Pero esto no le quita importancia, ya que, gracias a su existencia, toda esta zona de la nación se pobló. Además, durante las últimas décadas se transformó en un gran atractivo turístico, sobre todo para kayakistas expertos, que lo visitan para desafiar sus fuertes