«A veces es difícil explicarlo, porque no podemos nunca aceptar que haya cánticos racistas, pero yo ya había escuchado eso miles de veces. Pero ese día exploté», explica el jugador francés. Que guarda más rencor a los medios que al hincha: «Los periodistas me destruyeron, me destruyeron completamente. Lo merecía, no digo que fuera algo bueno lo que había hecho, pero no quería hablar con ellos. Después de mi suspensión, una nueva generación de jugadores llegó al equipo y empezaron a ganar. Cuando regresé, ya no volví a jugar para Francia».
|
etiquetas: cantona , patada , racismo