La historia de los linchamientos es la historia de la indignación y cada vez más, la historia de la estupidez y la intransigencia fomentada por los medios. Exactamente igual que la carta publicada en los medios dirigida a la pareja de un miembro de la Manada. Es lo que llevó a la condena de Dolores Vázquez sin pruebas de ningún tipo por asesinato. Es lo que piden los justicieros de pacotilla en las redes sociales cuando destapan los líos sexuales de algún famoso de medio pelo y se le señala como a un pervertido si lo es como si no.
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