"No hay ningún país que tenga más que perder, con el potencial disruptivo de las monedas digitales, que los EE.UU". Así lo advierten los analistas del mayor banco del país, JPMorgan, en su informe cubierto por
Bloomberg. Señalan que, si los países pudieran eludir la suspensión de SWIFT, se verían menos capacitados para alcanzar sus objetivos estratégicos geopolíticos, en los que se basa su dominio mundial con el dólar.