"No dejo de asombrarme escuchando o leyendo las propuestas de distintos economistas, sobre todo los escorados a la derecha, ante la que no está cayendo. En ciertos ámbitos, y no pocos, se empieza a exigir a España una política fiscal basada en la austeridad, aderezada con sus llamamientos al BCE para imponer tipos de interés más altos para frenar la inflación. El cacao mental sobre relaciones causales que rigen en las economías modernas demuestra, en primer lugar, que no han dado palo al agua en la última década"