El jefe de desarrollo de BMW, Klaus Fröhlich, ha reconocido que la marca alemana aún fabricará motores de gasolina durante, al menos, 30 años, mientras que los Diesel se mantendrán en liza durante un mínimo de dos décadas.
BMW, como el resto de fabricantes de coches, tiene ante sí el reto de cumplir con su agresiva estrategia de electrificación. De hecho, en 2023 el consorcio alemán pretende tener a la venta hasta 25 modelos impulsados por algún tipo de estos motores. Sin embargo, eso no significa que el fabricante vaya a dejar de lado los propulsores de combustión de la noche a la mañana. Es más, les augura un futuro aún longevo, tanto a los de gasolina como a los Diesel