Abren tiendas y comercios se repite estos días, pero la provincia está llena de pueblos en los que ya no hay ningún negocio abierto, donde viven menos de 10 habitantes e, incluso, uno o dos. Ellos viven pendientes del pitido de las furgonetas de los vendedores ambulantes, "nos dan la vida", dicen
|
etiquetas: medio rural , pueblos , coronavirus , vendedores ambulantes , alimentación