Las viviendas en la que residen estas personas son de protección oficial y tienen entre 45 y 50 años de antigüedad, de tres y cuatro habitaciones, los contratos son de renta baja e indefinida. La propuesta de Caja Burgos es “el traslado voluntario” a otras viviendas, de dos habitaciones (50 y 60m). El precio del alquiler de las nuevas viviendas sería de 276 euros mensuales, sin incluir los gastos de comunidad, que las colocaría por encima de los 300, y la duración del nuevo contrato de cinco años, pudiendo ser prorrogado otros tres...