En el programa electoral de Vox se manifiestan contra la escuela de arquitectura de la Bauhaus, fundamental para entender la arquitectura de los ultimos cien años en todo Occidente. El regimen nazi cerró la Bauhaus por considerarla "arte degenerado".

Estas matanzas se vinculaban a menudo con la alt-right, descrita como un efecto de la subida del movimiento en la era Trump. Pero muchos de estos asesinos, desde los matones de Atomwaffen hasta los atacantes de la mezquita de Nueva Zelanda o de la sinagoga de Poway, están más estrechamente conectados con una ideología de supremacismo blanco más nueva y radical: una que desprecia a la alt-right tachándola de cobardes poco dispuestos a coger el toro por los cuernos.

Análisis crítico en torno al surgimiento de corrientes y escisiones de carácter ortodoxo, maximilista e incluso reaccionario en el seno de la izquierda política. Se plantean posibles causas al fenómeno, se crítica lo limitado de sus planteamientos y discursos, y se propone cierta actitud que pueda dar impulso a un movimiento progresista que ha venido debilitándose desde el auge del 15M (y movimientos análogos).

Pero los comunistas, además, no podemos defender, ni siquiera una vez destruido el sistema capitalista, una teoría como la de la renta básica, que puede ser entendida como el derecho al parasitismo. En una sociedad socialista, el trabajo debe ser una obligación (por supuesto, para quienes estén en condiciones de trabajar), aunque, evidentemente, no en el mismo sentido que bajo el capitalismo. En el socialismo el trabajo cambia de naturaleza. Ya no se trabaja en beneficio de un capitalista. Se trabaja en beneficio del conjunto de la sociedad.

Los puestos de responsabilidad del aparato de Estado en ámbitos como la economía, la Policía, la justicia, las Fuerzas Armadas y los medios públicos quedan en manos de personas de la máxima confianza de Orban, con mandatos blindados de 9 a 12 años. Desde diciembre, una nueva ley de medios aprobada hace un año por el Parlamento permite ya al Gobierno ejercer un férreo control sobre el trabajo de los periodistas.