Los niños sufren de la misma forma que los adultos por el dolor ajeno, según ha descubierto una investigación de la Universidad de Chicago. Analizando los cerebros de 17 niños de entre 7 y 12 años, se descubrió que mostraban, al ver a alguien sufriendo dolor físico, las mismas respuestas neuronales que los adultos, y en las mismas áreas cerebrales. Además, regiones adicionales del cerebro, relacionadas con los juicios morales, se activaron también cuando los niños observaron imágenes en las que una persona hacía daño a otra de manera...