Turquía ha llevado a cabo ataques aéreos contra militantes kurdos en las vecinas Irak y Siria. Los aviones atacaron objetivos en Metina, Hakurk, Gara y Qandil, en el norte de Irak, pero no especificó las zonas en Siria. Los cazas destruyeron cuevas, búnkeres, refugios e instalaciones petrolíferas "para eliminar los ataques terroristas contra nuestro pueblo y nuestras fuerzas de seguridad y para garantizar la seguridad de nuestras fronteras" dijo el Ministerio de Defensa turco.