En general, la imagen que nos viene a la mente cuando hablamos de ríos es la de un curso fluvial perenne, es decir, con un caudal constante. Sin embargo, aquellos cursos que no cuentan con un flujo permanente prevalecen en todas las regiones climáticas. Son los ríos temporales. A nivel global, estos cursos de agua representan el 69 % de los pequeños cauces de cabecera, alcanzando cifras de entre el 30-40 % de la totalidad de los ríos de mayor entidad en latitudes inferiores a los 60°.