Frente al tsunami verbal de Trump, la discreción de zorro gallego, que algunos ven como pasividad, de Rajoy. Esos silencios ladinos, esa prudencia. Esa hipocresía sibilina. Y es que lo que Trump sueña, Rajoy ya lo tiene. Su muro (valla) en Melilla. Y sus centros de internamiento de extranjeros. Y sus devoluciones en caliente. Y sus sin papeles sin atención sanitaria. Y su abandono escolar, sus trabajadores pobres, su aumento de la desigualdad social, su pobreza energética... La gran diferencia entre ambos es que Rajoy no presume...