Estas palabras son para que nadie se engañe. Cuando los mercenarios te ensalcen, nosotros dejamos claro nuestro desprecio por todo el daño que hiciste. La democracia no debe celebrar a los que han luchado contra la democracia. Aunque haya que recordarlo precisamente hoy, que te empeñas en marcharte haciendo ruido. Toda muerte es una derrota. Incluso la tuya. No me alegro de que hayas muerto. Pero no nos engañamos. Ha muerto un aprovechado cuyo principal interés fue él mismo, un autoritario, un arrogante, un fascista.