Recibimiento en 1952 del Generalísimo por parte del Generalísimo de España donde se llegarían a acuerdos para enviar engañadas a personas procedentes en su mayoría de Burgos y Valencia, que fueron repartidas en diferentes zonas de Rep. Dominicana donde, en teoría, les estaba destinada la entrega de parcelas, viviendas, aperos y cierta cantidad de dinero en efectivo hasta lograr las primeras cosechas. Sin embargo, pronto se demostró el engaño de esas promesas y la indiferencia de las autoridades españolas hacia la situación.