Cuando el general romano Sila tomó Atenas en el año 86 a.C. obtuvo un premio fantástico: la biblioteca de Aristóteles. Efectivamente, buena parte de la biblioteca del famoso filósofo había sido llevada de vuelta a Atenas por Apelicón, quien la había comprado en muy mal estado y se dedicó a restaurarla, no con demasiado tacto. Los soldados romanos, al entrar en la ciudad el 1 de marzo de aquel 86 a.C., encontraron a Apelicón escondido en su biblioteca, dieron cuenta de él y avisaron a Sila de su hallazgo. Éste ordeno cargar los libros...
|
etiquetas: sila , atenas , aristóteles , biblioteca , academia , platón