Al parecer, Lord Kingsborough no había podido sufragar el coste de la publicación de Antigüedades de México (1831-48), la extensa obra magna a la que dedicó casi dos décadas de su vida. La envergadura del proyecto de Kingsborough era enorme: nueve volúmenes (con un décimo previsto pero nunca terminado), que pesaban en conjunto casi 30 kg y presentaban exuberantes facsímiles en color de manuscritos pictóricos mexicanos. La serie de libros, cuyo contenido abarcaba toda la gama -desde tablas astrológicas mayas y genealogías mixtecas hasta (...)
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