Durante las pruebas experimentales que trataban a pacientes con glioblastoma avanzado mediante nuevas técnicas de inmunoterapia, los científicos lograron que un paciente de 50 años, con una esperanza de vida de semanas, quedase libre de tumores tanto en el cerebro como en la espina dorsal, siguiendo vivo un año después. Paper original (The New England Journal of Medicine):
www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMoa1610497