¿Cómo podemos preservar nuestro conocimiento hoy en día para los próximos milenios? Robert Grass, profesor del Departamento de Química Aplicada y de Biociencias de la ETH Zurich, ha logrado almacenar información en ADN, preservarla de condiciones extremas e incluso leerla después sin errores. Los segmentos de ADN portadores de la información se encapsulan en nanoesferas de sílice y usa un algoritmo para evitar los errores. Afirman que su sistema permitiría guardar datos intactos durante más de un millón de años. En esp.:
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