Hace seis años, el poeta Luis García Montero atravesaba un momento de crisis personal que, en buena medida, era fiel reflejo de la crisis tan grave que vivía —y sigue viviendo— la sociedad. Se acordó entonces de la famosa frase de Jean-Paul Sartre “el infierno son los otros” y decidió averiguar hasta qué punto el infierno estaba en él mismo. Se encerró en casa y se dedicó “de manera un poco desesperada, a lo Sartre”, a indagar qué le pasaba a él y al mundo y a tratar de encontrar alguna solución, “la posibilidad de un acuerdo, de una esperanza,
|
etiquetas: garcia montero , poesia