El sistema de amarre de los buques es uno de los sistemas que menos ha evolucionado a lo largo de la historia marítima. Por ello, y unido al gran número de accidentes provocados en operaciones portuarias por dichos sistemas, algunas empresas están llevando a cabo innovaciones en el amarre, la mayoría de ellas automatizadas. E íntimamente relacionado con el amarre, aparece la operación más peligrosa para el responsable del buque, la del atraque del barco. Probablemente se trate de la maniobra más dificultosa, dentro de todo el entramado de las maniobras portuarias que abarcan operaciones a bordo, y en los muelles. Pero a pesar de todo, en la actualidad, la “soledad” del encargado de atracar el buque también está evolucionando, al poder ser ayudado por nuevos y revolucionarios sistemas.