A veces pienso en El planeta de los simios e imagino que George Taylor viaja en su cápsula supersónica a través de espacio y tiempo hasta aterrizar en un universo paralelo, un territorio hostil e inexplorado que se parece demasiado al nuestro. En nuestros días, una floreciente comunidad de simios ha acaparado el debate público y se encarama con antropoide agilidad en las butacas de los gobiernos. Estoy hablando de otra categoría de primate, un homínido de nuevo cuño que ha decidido por propia voluntad renunciar a los avances
|
etiquetas: evolución , retroevolución , política , hombresimios