Con 23 años y un bebé de 4 meses, Anna tenía claro que no se podía permitir otro embarazo. Pero también que en Texas, con una de las legislaciones estatales más restrictivas de EE.UU., no iba a poder abortar. Así que encontró un número de teléfono en las redes sociales y simplemente escribió por WhatsApp: "Necesito abortar". Lo recibió Sandra Cardona en Monterrey, México, quién fundó hace 6 años en la capital del norteño estado de Nuevo León la Red Necesito Abortar, a la que bautizó así para que se encontrara fácil en Google y redes sociales.
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